Tódor Zhívkov nació el 7 de septiembre de 1911 en la aldea de Právets (oeste de Bulgaria) en el seno de una familia campesina pobre. En 1932 ingresó en la filas del Partido de los Trabajadores de Bulgaria-comunistas (BRP, por sus siglas en búlgaro), que en 1948 se rebautizó Partido Comunista Búlgaro (BKP, siempre por sus siglas en búlgaro). En aquel mismo año Zhívkov pasó a formar parte del Comité Central del Partido Comunista, del que fue elegido primer secretario en 1954. En 1962 se convirtió en Presidente del Consejo de Ministros, y en 1971 encabezó el Consejo de Estado. El 10 de noviembre de 1989, fecha en que en Bulgaria comenzó el proceso democrático, fue destituido de todos los cargos que ejercía y a inicios de 1990 fue detenido y acusado de varios delitos. Esta es, en breve, la biografía del hombre que gobernó Bulgaria durante 33 años. Los investigadores de este período de la historia reciente del país enfatizan en que precisamente el gobierno autoritario de larga duración de Zhívkov contribuyó a la supresión de la iniciativa personal y de la divergencia, y tuvo un efecto nocivo sobre la formación tardía de la sociedad civil en el país.

El ascenso político de Zhívkov en el período 1953 a 1964 coincidió con el cambio generacional en la vida política búlgara. Aquella época de estrategias económicas diversas y de experimentos estaba estrechamente ligada a su consagración y afirmación políticas en el país y ante la Unión Soviética. Durante todo su mando no dejaba de recalcar con obstinación en la victoria del modelo socialista. No obstante, tanto este modelo como su gestión supusieron la quiebra de Bulgaria en tres ocasiones. La primera fue en 1960, cuando en secreto y de forma casi criminal vendió las reservas de oro del país a la Unión Soviética. La segunda vez fue en el período de 1977 a 1979, cuando fue acumulada una deuda de 6 mil millones de dólares hacia bancos occidentales que Bulgaria no estaba en condiciones de pagar. La tercera quiebra se produjo en 1989, cuando, a pesar de que el país ya estaba en la bancarrota desde hacía dos años, Zhívkov prolongó la vida de su gobernación con nuevos préstamos de bancos occidentales.

Para el Estado el precio de esta administración autoritaria se tradujo en 11 mil millones de dólares de deuda externa y en 20 mil millones en el plano interno, agricultura quebrada, complejo militar-industrial endeudado y un recién creado sistema empresarial sin recursos en divisas. La única excepción fueron las empresas de comercio exterior, controladas por la Seguridad del Estado, que se convirtieron en alcancías de los nuevos millonarios capitalistas pintados de rojo.

En sus monólogos ante los fiscales de las causas penales Nº 1 y Nº 4 Zhívkov reconoce su culpa para la debacle económica de Bulgaria pero no lo hace públicamente. En la Causa Penal Nº 1 al ex líder de Estado se le acusa de haberse excedido en el ejercicio de su poder y derechos con el fin de enriquecerse él mismo y personas de su entorno. La Causa Penal Nº 4, incoada en 1991 para estableces las causas y los culpables del colapso económico del país, no llegó a los tribunales por falta de cargos formulados.

En 1990 contra el hasta no hacía mucho autócrata fue incoado un procedimiento penal por el cambio forzoso de los nombres musulmanes de los ciudadanos búlgaros de origen turco y su expatriación. El 18 de enero de 1990 fue emitida una orden para su detención pero al cabo de algunos meses la medida fue sustituida por arresto domiciliario.

El pueblo búlgaro y la comunidad internacional esperan de este proceso que sea un proceso político –dice Zhívkov en la víspera del primer proceso contra él– . Respecto a acusaciones contra Tódor Zhívkov de delito contra el Estado, contra el pueblo, etc., puedo decir que no se me han formulado tales cargos. Absolutamente todos los cargos durante la investigación, de haber sido agente provocador, de haber exportado miles de millones de dólares a bancos occidentales, han sido revocados. Han sido calumnias, sensacionalismos, difamaciones contra el ex líder de Estado y Secretario General del Partido Comunista que la comisión especial, adscrita a la ex Asamblea Nacional bajo la presidencia de Andrey Lukánov, ha presentado ante la Fiscalía General para abrir una investigación.

El 25 de febrero de 1991 se inició una causa penal por la repartición ilegal de apartamentos, vehículos y dinero de la Dirección de Seguridad y Custodia, encargada de la protección de los altos cargos del Estado. En septiembre de 1992 el Tribunal Supremo declaraba culpable a Tódor Zhívkov y lo sentenciaba a 7 años de privación de libertad por haber causado al Estado daños del orden de varios millones de levas, moneda nacional búlgara. El 8 de junio de 1993 se instruyó la causa penal por los Campos de la Muerte, recintos penitenciarios en que fueron recluidas en el período 1944–1962 personas incómodas para el poder. Se incoaba después otra causa penal en la cual a Zhívkov se le acusó de haberse apropiado indebidamente de 11 millones 620 mil dólares estadounidenses para enviarlos como ayuda a “organizaciones obreras izquierdistas” en el mundo. En 1992 Tódor Zhívkov, junto con otras 22 personas, fue acusado de haberse apropiado de más de 200 millones de levas (equivalentes actualmente a 100 millones de euros) para repartirlos en forma de “ayudas políticas fraternales” en países del Tercer Mundo. En lo tocante a estas dos últimas causas penales el Tribunal Constitucional consideró que una apropiación indebida sólo era posible en existencia de “interés personal propio o ajeno”, y “no en los casos de interés público”. Con un dictamen de este tenor se suspendía también la causa penal por el proceso de cambio forzoso de los nombres musulmanes del grupo étnico turco ya que, según la legislación, en Bulgaria están sujetos a persecución penal los delitos contra “razas y nacionalidades” pero no los que apuntan contra grupos étnicos. Resulta así que por los 45 años de régimen totalitario y autoritario en la República Popular de Bulgaria no ha habido culpables. Mientras, Tódor Zhívkov moría el día 5 de agosto de 1998.