La aprobada en vísperas de Navidad e inmediatamente congelada, a causa de las fuertes críticas, reforma de pensiones en Bulgaria preveía, entre muchas otras cosas, también ofrecer a los asegurados para una segunda pensión la posibilidad de elegir entre los fondos universales privados y el gigante público, el Instituto Nacional de Seguridad Social. Antes de los cambios las cuotas a una segunda pensión se podían pagar solamente en alguno de los nueve fondos de pensiones.

Los aseguradores privados vieron en los cambios un intento de destruir su negocio que no estaría capaz de competir con el Instituto Nacional de Seguridad Social, respaldado por todo tipo de medios públicos, que con su estabilidad atraería a los clientes. La reforma fue detenida antes de arrancar, con la condición de que hasta finales de marzo todos los asuntos controversiales serían debatidos y resueltos.

Sin embargo, parece que los gobernantes están firmemente decididos a cambiar las condiciones bajo las que funcionan los fondos de pensiones. Algunos perciben el comportamiento de la jefa de la comisión parlamentaria de Presupuesto y Finanzas, Menda Stoianova, como un nuevo ataque contra los fondos de pensiones privados. Ella parece estar firmemente decidida demostrar que los cambios son necesarios y que los gobernantes tienen razón en cuanto a la reforma de pensiones. En aras de una mayor transparencia y una mejor protección de los intereses de los asegurados el Parlamento ha exigido de la Comisión de Supervisión Financiera información completa sobre el negocio, las inversiones y los resultados financieros de las compañías de pensiones privadas con el fin de analizar los problemas y tomar decisiones dentro del último plazo para el arranque de la reforma, el 1 de abril.

Los expertos opinan que Menda Stoianova tiene bastantes argumentos para querer introducir más transparencia sobre los negocios de los aseguradores privados. Mucho más que se trata de más de 3 millones de ciudadanos búlgaros y casi 3500 millones de euros acumulados de las cuotas ingresadas en los fondos privados. La presidenta de la comisión parlamentaria está convencida que “en los últimos 12 años la rentabilidad del dinero para una segunda pensión es con signo negativo o más baja que la inflación acumulada. Esto significa que de hecho el dinero ha disminuido”.

Las sociedades privadas de seguros no aceptan semejantes acusaciones y el presidente de la Asociación de Sociedades de Seguros de Pensiones Adicionales, Nikola Abadzhiev, señala, categórico, que “la rentabilidad media de los fondos para el período de 2002 a 2013 es de un 5 a 6%.  Del 30 de septiembre de 2012 al 30 de septiembre de 2014 es de un 6 a 7% en base anual”. Sin embargo, es un hecho que los fondos de pensiones ganan de tasas y cargos sumas sustancialmente mayores que las provenientes de la gestión de sus propios recursos. En el primer semestre del año pasado los fondos de pensiones han retenido más de 30 millones de euros en concepto de tasas con el fin de gestionar mejor las cuotas de los ciudadanos búlgaros. Al mismo tiempo, de la gestión de sus recursos propios los fondos han ganado a penas 2,3 millones de euros.

Provoca adicionales dudas sobre el negocio de los aseguradores privados también la circunstancia de que casi no se habla de éstos en público y que en los medios de comunicación casi no hay información publicitaria sobre ellos, a pesar de que supuestamente existe una fuerte competencia. O bien no tienen qué promocionar, o bien opinan que la publicidad es un lujo innecesario para ellos. Este comportamiento parece raro y contrario a las reglas de la economía de mercado. No es casual que el propio premier Boiko Borisov ha argumentado las reformas del sistema de pensiones, propuestas por los gobernantes, con la necesidad de activar los fondos de pensiones y promover la competencia entre ellos. Por otra parte, sin embargo, el regulador independiente, la Comisión de Supervisión Financiera, y la ley regulan tan estrictamente la actividad de las sociedades que en la práctica las reglas están unificadas y no cabe lugar a iniciativas individuales y productos innovadores.  

De todos modos, el paso promovido por la presidenta de la comisión parlamentaria de Presupuesto y Finanzas, Menda Stoianova, con el fin de conseguir una mayor transparencia y más información sobre la actividad de las compañías de pensiones privadas es útil y defiende los intereses de los asegurados.

Versión en español por Ruslana Valtcheva