Con un breve calidoscopio de videos que muestran “historias no contadas” de dignos búlgaros, científicos, empresarios, ingenieros, pintores que aportaron a la fama de Bulgaria por el mundo ha comenzado un foro social poco tradicional que muestra los logros de un nuevo programa educativo innovador del Ministerio de Educación y Ciencia. Mediante el programa aúnan recursos todas las instituciones búlgaras con representaciones por el mundo y se planifican objetivos a largo plazo y valor añadido en lo que se refiere a la formación y la educación de los niños que asisten a las clases en las escuelas dominicales búlgaras en el extranjero. 

Lo más importante es que el trabajo investigador de nuestros compatriotas redunda e nuevos datos sobre eminentes búlgaros del pasado y de la actualidad en todas partes del mundo. Uno de ellos es Iván Stánchov, diplomático, filántropo y donante de la escuela búlgara en Londres. James Velkov, el búlgaro que construyó dos ciudades nuevas en la isla de Tenerife en la época cuando estaba poco poblada. Es poco conocida la historia de aquellos 13 búlgaros de Estambul que a principios del siglo XX crearon el club de futbol turco Galatasaray y que entre ellos estaba el legendario futbolista búlgaro Boris Nikolov-El Oso, el primer capitán del equipo que sigue existiendo hasta hoy en día.

Hay cientos de pequeñas historias no contadas de búlgaros del mundo entero y “cuando terminamos nuestro gran relato sobre Bulgaria podremos responder a la pregunta por qué es importante que cada uno de nuestros niños por el mundo debe llamarse búlgaro”,. Así explica el contexto global del nuevo programa educativo la experta del Ministerio de Educación y Ciencia Natalia Mihalevska. Ella es la promotora de la iniciativa por parte de la institución pública y después de tres años de activa labor sobre el programa resume que para esta misión es necesario duro trabajo, una labor diaria “y sobre todo conocimientos, motivación y abandono del egoísmo. Se reclama así mismo una buena actitud y entendimiento con los demás”. 

El programa es nacional y educativo ya que entrelaza grandes y pequeñas historias, así como personales y nacionales, y las ofrece a los búlgaros para que las descubran a través de sus vidas independientemente del lugar en que estén por el mundo, explica los motivos para el inicio del programa en 2022 Natalia Mihalevska. 

Han sido involucrados en el trabajo 8 ponentes, profesores especialistas en lengua y cultura búlgara de la comunidad académica en el extranjero. Especialmente para la presentación de las Historias no contadas de los búlgaros llegaron a Sofía muchas de las personas que participan en su realización de Grecia, Italia, Gran Bretaña, Hungría. Otros 40 profesores de escuelas dominicales en Europa y América del Norte demostraron su coparticipación con lo que sucede en la sala por una video conferencia.

Gracias a este programa se ve una parte de la labor del Ministerio de Exteriores ya que las representaciones diplomáticas y las misiones en el extranjero también ayudan a las Historias no contadas de los búlgaros.

“Este programa es asimismo una nueva manera de estudiar y esperamos poder implementarlo en las escuelas búlgaras”, ha señalado en el éter de BNR Vanya Bálcheva, directora de la Dirección Educación de los Búlgaros en el Extranjero y red de escuelas en el Ministerio de Educación y Ciencias.

El Ministerio de Educación y Ciencia es el organizador institucional del programa, pero los motores son todos los profesores, alumnos y familias de los búlgaros en el extranjero que participaron en la creación de un archivo que es accesible en el canal del Ministerio en Youtube.

El programa fomenta la curiosidad científica de decenas de personas por el mundo. Un ejemplo de ello es Guencho Banev, profesor de idioma búlgaro en la Universidad Nacional de Atenas. Él despertó el interés de sus estudiantes griegos hacia las investigaciones sobre hechos poco conocidos de la historia búlgara e incluso les motivó a dedicarse a la bulgarística en plan académico. Guencho Bonchev señala otro hecho interesante: dos veces más estudiantes se matricularon a estudiar búlgaro en la Universidad de Atenas atraídos por la realización práctica en el programa Las historias no contadas de los búlgaros. 

“Trabajando en la Universidad de Atenas sobre nuestro proyecto que fue relacionado con la memoria histórica y se denomina Primeras reuniones, creamos una página web bilingüe, en griego y en búlgaro, titulada Grecobulgarica, con la idea de ofrecer una presentación completa de la visión helena sobre Bulgaria en plan académico, cultural y literario. La idea era encontrar historias que son muy importantes, pero han quedado al margen de los temas centrales en la historiografía. Una historia de este tipo es, por ejemplo, la visita del príncipe Battenberg en 1883 por invitación del rey griego en Atenas. Se trata de la primera misión diplomática de gran envergadura de un soberano búlgaro después de la liberación de Bulgaria. Los políticos de aquel entonces señalaron que este es el evento diplomático más significativo para el año en su país”. 

Fotos: BTA, Ministerio de Educación y Ciencia, Guergana Máncheva 

Versión al español de Histina Táseva