El Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo ha rebajado su pronóstico sobre el crecimiento económico del Sudeste de Europa en 2014, debido a las consecuencias de las inundaciones en la zona y la tensión surgida en el sector bancario de Bulgaria. Lo anterior se encuentra recogido en un comunicado de esta institución financiera.

El BERD bajó su pronóstico de un aumento este año del PIB de Bulgaria, de un 1,9%, hecho el pasado mes de mayo, a un 1,5% ahora, básicamente por los problemas en el sector financiero. El Presupuesto estaba calculado para un crecimiento del 1,8% pero se espera la actualización de aquél tras las elecciones parlamentarias del 5 de octubre próximo. En el informe del banco se destaca que las secuelas a largo plazo provocadas por las conmociones en el sector financiero muy probablemente serán mitigadas por la rápida actuación de las autoridades e incluso por la intención manifestada de adherirse Bulgaria al Mecanismo Único Europeo de Supervisión de la Banca. El economista Georgi Anguelov, del instituto “Sociedad Abierta” comenta el pronóstico del BERD:

“No es una evolución inesperada dado lo que viene ocurriendo en Bulgaria en los últimos meses, dice. Me refiero a la precariedad política, a que tras las elecciones a la Eurocámara el gobierno de aquel momento se fue. Tras las elecciones parlamentarias no quedará claro cómo será el gobierno siguiente. Así que ha habido varios meses en los que los inversores están aguardando para ver lo que ocurrirá, antes de hacer nuevas inversiones. Al mismo tiempo el caso relacionado con el Banco Comercial Corporativo sujeto a una supervisión especial, problema cuya solución se pospone para noviembre, también ejerce su influencia. En ese banco hay congelados gran número de depósitos y, al mismo tiempo, créditos. Esto genera incertidumbre para el entorno empresarial. Habrá demoras y postergaciones de decisiones inversionistas mientras no se resuelva este caso. Lógicamente, los bancos se mostrarán más exigentes y otorgarán difícilmente créditos ya que por el pánico en el sistema bancario a finales de junio procurarán mantener una mayor liquidez hasta que se quede zanjado el problema del Banco Comercial Corporativo. Para colmo, hay también problemas externos. Por un lado está la crisis entre Rusia y Ucrania, sobre todo la guerra civil en ésta, que repercute en las exportaciones y el turismo búlgaro. Por el otro están las condiciones climáticas adversas. Hubo inundaciones en Bulgaria las cuales provocaron un descenso notable del número de los turistas extranjeros. Esas inundaciones también han repercutido en forma negativa en el agro. No contamos con factores internos para el crecimiento, faltan reformas internas capaces de impulsarlo. Lo único que impulsa el sector económico nacional es que Europa va abandonando la recesión aunque lenta y penosamente. Esto se observa con nitidez en nuestras exportaciones que en 2013 iban bajando por la recesión en la UE. En resumen, no disponemos de factores internos para el crecimiento. La única que nos hace movernos es la situación exterior y en función de la evolución de los factores internacionales nos movimos en un sentido positivo o negativo.

El Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo espera que el sector económico búlgaro registre un crecimiento del 2%, en 2015, tal y como había sido su pronóstico anterior. “Se espera que 2015 sea notablemente mejor para todos los países europeos, dice Georgi Anguelov. En eso residen las expectativas de que al mejorar la economía europeo y aparecer un mayor número de puestos de trabajo y un sector financiero estable, estos fenómenos positivos se puedan trasladar a Bulgaria. Eso en el supuesto de que los búlgaros no vayamos a crear otro problema complementario que provoque otro descenso. Para lograr este 2 % en 2015 deberemos resolver acertadamente el problema relacionado con el sector de Energía, al borde de la quiebra, el de la casi quiebra del Banco Comercial Corporativo, el del creciente déficit presupuestario. De manera que en 2015 habrá oportunidades para un crecimiento mayor y sólo de nosotros depende si las vamos aprovechar o desperdiciar”, concluye el economista Georgi Anguelov del Instituto Sociedad Abierta”.

Versión en español: Mijail Mijailov