En la noche del 24 de julio, Rusia atacó con misiles y drones iraníes Shahed la infraestructura portuaria ucraniana en la región de Odessa, donde viven muchos étnicos búlgaros ucranianos. El foco de los ataques fue contra el puerto danubiano de Reni, que la flota rusa no pudo someter a un bloqueo naval. Seis personas resultaron heridas y cuatro hangares de grano y tanques de combustible fueron destruidos, informó UNIAN.

En respuesta de los 40 edificios históricos y la Catedral de la Transfiguración en el centro de Odessa atacados, drones ucranianos asaltaron sin éxito el Ministerio de Defensa en Moscú. Uno de los dos drones fue derribado a cien metros del Ministerio en Komsomolsky Prospekt, informa la web "Argumenti and Fakti". El segundo golpeó un centro de negocios. Hristo Grozev, de la web Bellingcat, comentó que la Universidad Militar y varios sitios secretos, incluido el departamento de ciberataques de la inteligencia militar rusa, estaban cerca del dron derribado.

También hubo un ataque de drones ucranianos contra la península de Crimea ocupada. Un almacén de municiones rusas en Dzhankoye fue atacado, anunció el gobernador designado por Moscú, Sergei Aksyonov. Los residentes que vivían en una zona de 5 km. fueron evacuados del almacén averiado. También se suspendió el tráfico en la línea ferroviaria estratégica en la región y la carretera en el cuello de Crimea.