En medio de la canícula de julio, continúan las acaloradas discusiones sobre el Presupuesto 2023. Hasta el 25 de julio, fecha en que la Asamblea Nacional debe votar el marco financiero definitivo de Bulgaria, debe tomarse una decisión sobre el aumento de los salarios del sector público. El 10% previsto por el ministro de Finanzas no satisface las expectativas de los "trabajadores pobres", que literalmente luchan bajo la presión de los precios galopantes de la electricidad y la calefacción. En solo un año, los precios de muchos alimentos han subido más de un 20%, afectando los ingresos que no pueden seguir el ritmo de la inflación. Según el líder del sindicato KNSB, Plamen Dimitrov, hay suficiente dinero en el Estado que podría destinarse a los salarios, los cuales están drásticamente rezagados. Por ello, el sindicato ha organizado una serie de protestas frente a la Asamblea Nacional para exigir una revisión del mantenimiento de los trabajadores en el ámbito presupuestario.

"Hace mucho tiempo que hemos señalado de dónde se pueden obtener los fondos", declaró Plamen Dimitrov en una entrevista con BNR. “Los gastos de capital están sobrevalorados. En el presupuesto aprobado el 1 de agosto, se prevén gastos de capital por valor de 8.200 millones de levas. Hasta el 1 de abril, el programa de capital solo había ejecutado 1.800 millones de levas. ¿Quién en su sano juicio podría pensar que en los próximos cinco meses podrían gastarse unos 6.500 millones de levas? Por eso creemos que podrían quedar 500 millones de levas, pero no porque no queramos destinarlos a gastos de capital. Son importantes para la economía, pero el tiempo no será suficiente y los procedimientos necesarios para llevar a cabo las reparaciones previstas y otros gastos no permitirán hacerlo antes de fin de año”.

El Sindicato Podkrepa también organizó una protesta frente al Parlamento, con demandas de un impuesto sobre los beneficios excedentes, un aumento de los impuestos de sociedades, la introducción de un mínimo exento del impuesto cooperativo, el retorno del IVA a los niveles estándar para restaurantes y gimnasios, entre otros, para garantizar los ingresos a Hacienda. Según el asesor económico del sindicato Podkrepa, hay una diferencia en las demandas de los dos sindicatos nacionales y, por lo tanto, solo el sindicato Podkrepa no apoyó el presupuesto estatal. "Nosotros seguimos insistiendo en que no nos engañen con 200 millones de levas adicionales, mientras a Bulgaria se le roban miles de millones", enfatizó Vanya Grigorova. "Sofía no es Bulgaria, por eso hemos organizado protestas en todo el país."

"Insistimos, luchamos hasta el final y esperamos que los diputados comprendan que la política de sangrar a las empresas búlgaras y a los ciudadanos búlgaros trabajadores no conduce a nada bueno", declaró Vanya Grigorova en Radio Bulgaria. "No nos oponemos al déficit del 3%, pero no puede ser a costa del pueblo. Esto es exactamente lo que se ve en este presupuesto".

Según las palabras del diputado del Partido Socialista Búlgaro y miembro de la Comisión de Medios de Comunicación, Iván Chenchev, existe la posibilidad de aumentar los ingresos de quienes trabajan en el ámbito presupuestario.

"Por supuesto, debe haber un aumento de los salarios, y no se imaginan lo fácil que es", subrayó Ivan Chenchev en una entrevista especial para Radio Bulgaria. "Esperemos que mis colegas del pleno tengan todavía conciencia, o al menos, incluso los que no la tienen, tomen una decisión política a favor de un aumento salarial. Lo malo es que las cosas se han descuidado tanto en el sector público que en todos los ámbitos la gente está realmente agotada, y eso solo debería superarse dentro de la Asamblea. Creo que con buena voluntad se puede lograr. No tengan ninguna duda de que haremos estas propuestas".

En respuesta a las afirmaciones sindicales de que hay margen para aumentar los ingresos de los empleados del sector público, el Ministro de Finanzas, Asen Vasilev, confirmó a BNR que, de hecho, hay fondos adicionales presupuestados.

"Ciertamente, hay reservas. Todos los fondos para los programas de la UE que finalizan están asignados, independientemente de si los proyectos se llevan a cabo o no. Existe cierto margen, pero cada demanda de aumento salarial conduce a nuevas exigencias y nos encontramos vertiendo cada vez más dinero en un sector público que aún no ha sido reformado.

No obstante, la cuestión de las llamadas reformas es muy relativa. En muchas estructuras dependientes del Estado se aplican desde hace años las llamadas políticas de optimización, hasta el punto de que el trabajo de las unidades despedidas se distribuye entre los empleados sin que esto afecte a sus salarios, como estipula el Código Laboral. Incluso se da el caso de que no se pueden encontrar especialistas cualificados para sustituir a quienes se han jubilado debido a los bajos salarios. Lo mismo ocurre en BNR, donde no se pueden encontrar ingenieros cualificados por un salario de 1,000 levas. Por tanto, la cuestión no es solo la supervivencia de todas estas estructuras, de las cuales depende el funcionamiento del Estado, sino también su desarrollo como parte importante del futuro del país.

Según Iván Chenchev, el verdadero periodismo se encuentra en los medios de comunicación públicos, donde se encuentra la escuela de periodistas. Al mismo tiempo, BNR y BNT siguen financiándose mediante un programa por horas, a pesar de que sus funciones van mucho más allá del tiempo de emisión. Son los medios que han preservado la memoria nacional desde el momento de su creación y más allá. Son los medios en los que los búlgaros confían para recibir información fiable e independiente."

Versión al español de Borislav Todorov