El presidente de la Asociación Búlgara Horizont en Ojrid, Liubcho Kurtelov, ha sido el primero en echar una papeleta en el colegio electoral cerca del Lago de Ojrid. Para Radio Bulgaria ha contado que a pesar de la tensión contra los búlgaros en la ciudad de los últimos meses, la participación electoral alcanzará la del voto anterior. Los ciudadanos búlgaros Macedonia del Norte votan en la Embajada búlgara en Skopie, en el Consulado General en Bitola, en Kavadartsi, Prilep, Strumitsa, Tetovo y Ojrid.  

En las elecciones anteriores durante el otoño de 2022 en Ojrid han votado casi 65 electores y las esperanzas hoy son que su número sea el mismo. Liupcho Kurtelov no es optimista: “La tendencia es a la disminución del número. Ya no es muy grande, creo que 170 es el mayor número de los votantes en unas elecciones aquí”.

¿De qué manera lo que sucede en Ojrid en las últimas semanas, la clausura del club Tsar Boris II y la paliza contra uno de sus miembros, impacta en su deseo de participar en unas elecciones búlgaras?  

“Lamentablemente el clima no solo en Ojrid, sino en Macedonia del Norte obliga a las personas que sean reservadas. Algunas personas tienen miedo y esto impacta al número de los votantes”, analiza Kurtelov y no esconde que siente un cambio en la actitud de sus compatriotas hacia los búlgaros en la ciudad:  

“Sí, las personas se muestran más reservadas en sus contactos personales, ni hablar de las redes sociales. Están al tanto de ello un gran número de los ciudadanos búlgaros que siguen estos procesos en Facebook y el resto de las redes sociales. Lamentablemente se ha generado un odio hacia Bulgaria y sus ciudadanos, pero esperamos que esto sea la culminación y que de aquí en adelante nuestras relaciones mejoren”.  

Nuestro interlocutor, que trabaja como guía turístico en Ojrid y por todo el territorio macedonio, señala que se nota un descenso del interés por parte de los turistas búlgaros hacia Macedonia del Norte. “A pesar de que no hay una amenaza real, la psicología es importante”, dice él. Está convencido de que no habrá un cambio en la política de Bulgaria hacia Macedonia del Norte, independientemente de la fuerza política que asuma el poder en Bulgaria.  

“El problema no está en Bulgaria, sino aquí, en la política del gobierno macedonio y mucho más en los medios de comunicación macedonios que difunden odio y ánimos ántibúlgaros. No veo cómo estas elecciones cambiarían las cosas. Es interesante la condición que se le ha planteado a Macedonia del Norte no por Bulgaria, sino por Europa: la inscripción de los búlgaros en la Constitución macedonia. De esto depende cómo se desarrollarán las cosas”.  

Versión al español de Hristina Táseva