"El Reino de Marruecos es un país exótico que atrae a la gente con su cálido sol y su hermosa naturaleza, con las sonrisas y la hospitalidad de la población local hacia las personas de países extranjeros", así comienza su relato sobre el país en que lleva viviendo 24 años la búlgara Annie Radeva. Ella ha convertido su estancia en el lejano país en una misión y dedicación a la causa Bulgaria. Como dirigente de la escuela dominical búlgara "Rodolyubie", adjunta a la Embajada de Bulgaria en Marruecos, esta compatriota nuestra se ha planteado la tarea de conservar la lengua materna y la identidad cultural, y de revivir las tradiciones entre la comunidad búlgara de ese país.
"Nuestra larga historia y variada cultura conserva los nombres de un gran número de notables búlgaros a quienes definimos con orgullo como Próceres de la Ilustración Nacional. Gracias a ellos hoy también existe la nación búlgara, la creencia en los valores duraderos, la moral y las virtudes que nos han conservado a lo largo de los siglos", dijo Ani Radeva en una entrevista para Radio Bulgaria. Como profesora de una escuela dominical búlgara, se dirigió a todos sus colegas que cumplen la misión de verdaderos próceres de nuestra época.
"Cualquiera puede ser llamado un prócer, siempre que contribuya a la preservación y el desarrollo de la cultura y la historia búlgaras, al idioma y a la conciencia búlgaros y lleva Bulgaria en su corazón como un recuerdo puro y cariñoso, como amor, idea y esperanza, está convencida Annie Radeva. La escuela dominical búlgara "Rodolyubie" desempeña un enorme papel para la preservación de la lengua y el espíritu búlgaro entre la comunidad en el Reino de Marruecos. La escuela es un factor que unifica a todos los búlgaros y guarda la memoria de todo lo búlgaro como literatura, historia, costumbres, tradiciones. Para el funcionamiento de la escuela tienen gran importancia el apoyo que recibimos del Ministerio de Educación y Ciencia y la ayuda de la Embajada de Bulgaria en Marruecos.
Gracias a la financiación del Ministerio de Educación de Bulgaria, hemos podido comprar libros y manuales, además tenemos una biblioteca escolar en la ciudad de Kazablanka y sus estanterías están llenas de libros. Incluso las personas mayores de la ciudad acuden a la biblioteca para buscar una lectura en búlgaro. Aparte de los manuales, la escuela compró trajes típicos búlgaros para los niños. También es muy grande el apoyo por parte de los padres, que hacen un gran esfuerzo para llevar a sus hijos a la escuela. A pesar de que la mayoría de ellos viven bastante lejos dedican una parte de su tiempo para que sus hijos puedan asistir a nuestras clases. Los mueve únicamente el deseo de aprender búlgaro y conocer las tradiciones búlgaras.
Ani Radeva comparte que cada año, al acercarse el 1 de noviembre, siente una verdadera empatía y un gran deseo de difundir la obra de los Próceres de la Ilustración Nacional entre las familias de los búlgaros en el Reino de Marruecos. Según sus palabras, el ímpetu y la admiración por todo lo búlgaro se intensifican cuando uno vive fuera de las fronteras de su país.
"Este año, nosotros de la escuela "Rodolyubie" hemos preparado un museo virtual de los próceres búlgaros y cada padre tenía la tarea de contar lo que sabe sobre los guardianes del espíritu y la cultura búlgara. Los niños también tenían que cumplir una tarea: aprender un poema sobre los Próceres de la Ilustración y contar una historia sobre uno de los escritores, revolucionarios o artistas búlgaros. Con esto, prestamos especial atención al tema de los próceres: qué significado tiene la palabra, quiénes son los Próceres de la Ilustración y qué recordaremos de su obra. Me siento muy alegre por los esfuerzos, el entusiasmo y el esmero con los cuales los niños de Marruecos han aprendido de memoria poemas y canciones dedicados a los Próceres de la Ilustración."
Versión al español de Borislav Todorov
Fotos: Escuela dominical búlgara "Rodolyubie" en Marruecos
Los búlgaros de Besarabia son una parte “indisoluble del cuerpo búlgaro, de la comunidad búlgara espiritual y cultural. Persistirán ya que el lazo entre ellos y nosotros es inquebrantable”, se señala en el único número del periódico Besarabia búlgara..
La vida de los búlgaros en la República Checa es muy ajetreada. Trabajan en masa en distintas fábricas, el trabajo es por turnos, el cansancio se acumula y la gente no quiere viajar a la capital un domingo sólo para poder votar. Así explica Irena..
La jornada electoral en Reading, al sureste de Inglaterra, transcurre con calma. Se espera que voten unas 300 personas y en el único colegio electoral de la ciudad se puede votar sólamente en papel. Es la segunda vez que este colegio electoral cambia..
La usurpación del patrimonio cultural e histórico es una de las múltiples e inevitables consecuencias en cada conflicto militar tanto en plan histórico..