Bulgaria celebra el 145 aniversario de la epopeya de Shipka, la heroica batalla que duró seis días y en la cual los combatientes búlgaros demostraron que la libertad no es un regalo, sino que fue conquistada con la sangre y el sacrifico de miles de búlgaros.

En el pico de San Nicolás, en la Cordillera de los Balcanes, donde está construido el Monumento a la Libertad, a mediados de agosto de 1877 tuvieron lugar las más duras batallas durante la Guerra Ruso-Turca, libertadora para Bulgaria. De la defensa del pico Shipka dependía el desenlace de toda la guerra.

• Los iconos fotográficos de la Guerra Ruso−Turca de 1877−1878

• Las cumbres de Shipka y Buzludzha

“Aquí fueron echados los cimientos del ejército búlgaro”, dice el director del museo. “Este lugar nos recuerda que el pueblo búlgaro ha sobrevivido momentos muy duros en su desarrollo histórico y ha logrado superarlos. Bulgaria ha sobrevivido gracias a la fe en Dios, la laboriosidad del pueblo, el apoyo de la familia y la valentía del ejército”, dice el historiador Chavdar Ánguelov. Las celebraciones continúan hasta el 23 de agosto.