La festividad religiosa del Lunes del Espíritu Santo es el día en que se conmemora a los búlgaros étnicos macedonios y todos quienes se inmolaron por la libertad de Macedonia.
Entre los años 1912 y 1918, Bulgaria libró tres guerras por la unificación nacional, que terminaron en el injusto Tratado de Neuilly que obligó a Bulgaria a ceder varios de sus territorios. Las tierras de Macedonia del río Vardar y del Egeo, pobladas por búlgaros, se quedaron fuera de Bulgaria. Cientos de miles de búlgaros fueron expulsados y se convirtieron en refugiados.
La Organización Interna Revolucionaria de Macedonia (OIRM) inició una lucha para crear una Macedonia independiente, donde se protegerían los derechos humanos de los búlgaros. En 1923, la organización comenzó a celebra el Lunes del Espíritu Santo como el Día de Macedonia y los Héroes Búlgaros Caídos con numerosas procesiones de los refugiados en Bulgaria.
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Despejado
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