“La televisión transmitió un ataque contra la unidad militar en Vinitsa y la transportación de ciudadanos de a pie que resultaron heridos. A 20 kilómetros de Kiev, en Brovari, también están atacando la unidad militar. Los disparos se oyen en la zona en que estamos nosotros y ésta dista unos 60 kilómetros del lugar. Acabamos de ver un misil que se dirigió a Kiev.” 

En estos términos Inna, cuyo nombre completo no publicamos por cuestiones de seguridad, ha descrito ante la sección rusa de Radio Bulgaria la situación en Ucrania. 

La mujer ha instado al mundo entero que ayude a Ucrania y que detenga las acciones del presidente ruso, Vladimir Putin. En sus palabras, el pánico se ha apoderado de la gente y muchas personas buscan una salvación al oeste.

“Aquí ha comenzado una auténtica guerra. Ha sido declarado estado de emergencia. Nos despertamos a las cinco de la madrugada por el estrépito de las explosiones. No muy lejos de nuestra casa en Kiev fue derribado un avión. Los rusos avanzan a lo largo de toda la frontera. Ya han sido destruidos muchos almacenes ucranianos de municiones en múltiples provincias. Vivimos en proximidad al aeropuerto militar en Vasilkovo.  Sobre el lugar fueron lanzados siete misiles. Ucrania no ha atacado a nadie y nunca se ha preparado para hacerlo. Hoy todas las escuelas están cerradas. Los niños tienen miedo. Somos personas pacíficas, pero defenderemos nuestra Ucrania hasta la última gota de sangre. Exhorto al mundo entero que nos ayude, porque la guerra perjudicará a todos”. 

Versión en español de Hristina Táseva