El primer día de enero, en la aldea de Varvara (en la región de Pázardzhik) grupos de kúker han estado persiguiendo a las fuerzas del mal.
Los dervish, como los llaman los lugareños, empiezan a recorrer las casas a la medianoche y al final todos se reúnen en el centro del pueblo donde se ponen a bailar su espectacular danza dervish.
Para ahuyentar el mal y allanar el camino para un nuevo comienzo, este 1 de enero más de 100 kúker de toda la región se han reunido en la aldea de Varvara, donde la fiesta es una de las más populares y veneradas y continúa durante todo el día. La tradición se ha ido transmitiendo de generación en generación durante más de 300 años, según ha informado la corresponsal de esta emisora pública.El verano de 2024 será recordado por casi dos meses de calor, incendios devastadores y sequía que afectaron a casi todo el país. Según el Sistema Europeo de Alerta de Incendios Forestales, basado en imágenes por satélite, a principios de..
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