Según el análisis encargado por el Ministerio de Sanidad, con el fin de conocer las causas que provocaron la alta incidencia de mortalidad en Bulgaria durante la pandemia, no hay un factor específico que coloque a este país en los primeros puestos por este indicador en Europa. Las causas son numerosas según ha dicho Jristo Jinkov, director del Centro Nacional de Salud Pública y Análisis. “Lo más probable es que nuestro sistema sanitario haya fallado”, estima Jinkov. Otro factor es que los búlgaros viven 6 años menos que el resto de los europeos, y la población está aquejada por una serie de afecciones crónicas.

En el período del 1 de marzo de 2020 al 1 de mayo de 2021 han muerto en Bulgaria 166.050 personas. El 78% de la totalidad de decesos se ha producido en el grupo de riesgo de personas de 60 a 89 años de edad. La mortalidad por Covid−19 es de 123 por cada 100.000 habitantes, y por esta elevada incidencia de la letalidad Bulgaria ocupa el tercer puesto en Europa. Las muertes por coronavirus provocan un aumento de la mortalidad general ya que propicia una multiplicación de los decesos por enfermedades crónicas. Así pues, en el citado período, comprendido entre marzo de 2020 y mayo del 2021, las hospitalizaciones por Covid−19 han representado un 28% del total de los ingresos hospitalarios, causando esto un incremento de la letalidad en otras enfermedades por haber impedido su tratamiento y profilaxis.

A juicio de Jristo Jinkov, falta una concepción íntegra sobre la gestión de la pandemia. La gestión de la crisis es más bien asunto de política y no tanto de medicina. Las medidas antiepidémicas decretadas en 125 distintas órdenes han sido incompletas, populistas y contradictorias. Esto ha generado desconfianza en la capacidad de las autoridades de gestionar la pandemia y ahora esto se refleja en el bajo interés por la vacunación.