El requisito de las autoridades búlgaras de que los turistas que entren en el país presenten una prueba PCR negativa ha provocado la anulación del 25% al 30% de las reservas desde el extranjero para el centro de montaña de Bansko, en Pírin. A pesar de esto, durante el pasado fin de semana  el centro estuvo lleno a tope de turistas búlgaros y rumanos. Al pie del teleférico se formó una cola de casi un kilómetro. Desde la Unión de Empresarios Turísticos están preparando una petición a los respectivos ministros insistiendo en que se implemente la posibilidad de que los turistas extranjeros presenten pruebas de antígeno que son más baratas y que no exista tal requisito para las personas que tengan certificado de vacunación, han informado los reporteros de Radio Nacional.