Morcilla a la parrilla, alubias en cacerola de barro con boletos o bien con jarrete ahumado, *kapamá… y de postre: peras y manzanas asadas o calabaza rellena al horno. Éstos son solo parte de los platos atractivos con los que los restaurantes de hoteles en la zona de los montes Ródope se preparan a recibir a los turistas, que este año, por cierto, serán mucho menos debido a las medidas restrictivas por la pandemia.
El menú especial ha sido ideado por la Asociación de Hoteleros y Restauradores de Vélingrad, famoso centro termal en las faldas del Ródope, en Bulgaria del sur. A finales de noviembre, antes de ser declarado el cierre parcial por la pandemia de Covid–19, los clientes de seis restaurantes locales podían aprovechar la sabrosa oferta, pero las medidas rigurosas contra la propagación del coronavirus obligaron a los restaurantes de todo el país a cerrar sus puertas. Ahora, con la nueva orden del ministro de Sanidad, que permite a los establecimientos de comida adjuntos a los hoteles a trabajar con un aforo reducido al 50% y solo hasta las 22 horas, algunos hoteles de la ciudad volverán a apostar en las delicias de la cocina local y abrirán el 22 de diciembre.
No obstante la crisis y el miedo al coronavirus, no faltan las reservas en esa ciudad tan conocida por sus aguas termales curativas. Tampoco falta el apetito a las opíparas mesas festivas que por estas fechas ofrecen platos especiales como la ensalada Sofenka (a base de alubias blancas de granos grandes), frijoles con cecina de pollo (plato típico de la población local, los pomak), sarmí o niños envueltos de hojas de col curtida con morcilla, pie de cerdo, distintos tipos de cazuela, con o sin carne, y otros desafíos irresistibles para el paladar.
No estaría de más decir que no todos los dueños de hoteles y restaurantes están satisfechos por la nueva orden de las autoridades sanitarias. Hay quienes afirman que las medidas preventivas dictadas por la Célula Operativa Nacional de lucha contra el coronavirus son discriminatorias y engendran más preguntas que respuestas. Sin embargo, los propietarios que se preparan a recibir visitas por estas fechas señaladas declaran su disposición incondicional de respetar todas las medidas preventivas y garantizar la seguridad y el buen servicio a todos sus clientes. Lo que está claro desde ya es que, a diferencia de años anteriores, el sector turístico tendrá que contar sobre todo con visitantes búlgaros.
*Kapamá − manjar de col fermentada con tres tipos de carne y tocino
Versión en español de Katia Dimánova
Fotos: archivo
Su deseo de ayudar a las pequeñas almas perjudicadas por el destino la llevó al otro lado del mundo. La Dra. Elena Shtarbanova, especialista en anestesiología del Hospital Santa Catalina de Sofía, admite que siempre había querido hacer voluntariado en el..
La fiesta de los kúker que se organiza en Shiroka Laka el primer domingo de marzo marca el término del invierno y el comienzo de la primavera. Entonces bajo el son cencerros se ejecuta un rito para ahuyentar el mal. Por tradición kúker, denominados..
El talentoso joven pintor Nedislav Peev, diagnosticado con un 90% de autismo, desde hoy dispone de una galería propia en la ciudad norteña de Dobrich. Gracias a la incesante lucha de su madre Kamelia Todorova el chico ya figura como “pintor” en el..
La sociedad búlgara sabe muy poco sobre los emigrantes búlgaros en Argentina. Las vías por las cuales los búlgaros que se trasladaron al país..