"Miles de nuestros miembros y simpatizantes, socios de coalición y personas que no tienen nada que ver con el Partido Socialista Búlgaro, desde ayer vienen manifestando su deseo y disposición de participar en protestas en todo el país, no sólo en defensa del presidente, sino para salvar a Bulgaria. Ayer las autoridades nos prohibieron celebrar la reunión tradicional de la izquierda en el pico Búzludzha. Pues, bien, tendrá lugar en Sofía, frente al Consejo de Ministros. La organizaremos como un mitin nacional, e invitamos a todos quienes deseen un cambio, independientemente de sus intereses políticos, que se unan", ha declarado la presidenta del Partido Socialista Búlgaro, Kornelia Nínova, en una declaración leída desde la tribuna parlamentaria.