2019 es un año relativamente bueno para el turismo búlgaro. Es un año con el mayor número de turistas satisfechos–dice a Radio Bulgaria Rumen Draganov, director del Instituto de Análisis y Evaluación del Turismo– . Uno de los motivos es que el litoral del mar Negro fue menos concurrido en comparación con el año anterior. Además hemos disfrutado de varios meses de calor y de un otoño templado, a diferencia de años anteriores, cuando las lluvias, las tormentas, las inundaciones, las franjas costeras desaparecidas y las víctimas humanas afectaron a la industria. A fines de octubre registramos 95,000 turistas extranjeros más que en 2018, lo que significa que el turismo no decae, ya que el parámetro principal: el número de turistas, se está comportando bien. Los ingresos por concepto de turismo este año superan en un 4% los obtenidos en 2018. Esto se debe al aumento de los precios y la oferta diversificada del producto turístico. Es verdad que comenzamos el año con preocupación por el retorno de Turquía, Egipto y Túnez en el mercado de la competencia. Al mismo tiempo, la bancarrota del operador turístico Thomas Cook tuvo un impacto negativo a finales de la temporada estival en Bulgaria, pero también en otros destinos. De modo que el año fue inusual, pero en general bueno.
En opinión de Rumen Draganov, aún no se sabe con exactitud cuál es el impacto financiero de la bancarrota de Thomas Cook en el negocio búlgaro, ya que el proceso de presentar reclamos contra los operadores turísticos del conglomerado Thomas Cook llevará un año o más. Sin embargo, los datos preliminares de hoteleros búlgaros indican que los daños oscilan entre varios miles y el millón y medio de euros para las entidades de negocio individuales en el país. ¿Conseguirá Bulgaria compensar el año que viene el número de turistas extranjeros mediante otros operadores turísticos?
La vida continúa. Ninguno de los millones de clientes de Thomas Cook renunciará a viajar. La pregunta es cuál otro operador turístico y de qué manera reemplazará a aquél. A ciencia cierta habrá una fuerte intervención por parte de los operadores turísticos en línea y las plataformas digitales que van desbancando a los operadores turísticos tradicionales. Las principales agencias de viajes europeas, que son unas 350, seguirán operando destinos como Bulgaria. Personalmente, no veo ningún daño grave como consecuencia de la retirada de un operador turístico tan grande.
Rumen Draganov comenta, asimismo, que se espera un aumento de alrededor del 3% en el número de turistas que llegarán al país durante la próxima temporada de invierno.
Estimamos que 1.6 millones de extranjeros, aproximadamente, visitarán Bulgaria entre el 22 de diciembre y el 22 de marzo. Unos 220,000 de ellos vendrán a esquiar y hacer snowboard. Además, durante este mismo período hay un gran número de festividades relacionadas con el calendario ortodoxo y otros eventos más, como el Festival de Juegos deMascaradaSurva, en la ciudad de Pernik, que reúne a miles de personas. Son muchos los turistas que vienen por turismo cultural en un entorno histórico urbano. Son principalmente los usuarios de aerolíneas de bajo costo, que han contribuido al crecimiento del turismo búlgaro en 2019. Si bien se observa una disminución en los viajes a través de los aeropuertos de Varna y Burgás, hay un aumento en los pasajeros en el aeropuerto de Sofía, así como nuevos vuelos a la capital búlgara. El turismo cultural en un entorno urbano e histórico, el turismo de balnearioy SPA, el turismo cinegético, extremo, rural, culinario, alternativo y juvenil son los que atraen a los turistas a Bulgaria, concluye diciendo Rumen Draganov.
Versión en español de Daniela Radíchkova
Foto: tourismboard.bg
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