Desde tiempos inmemoriales, los bordados que decoraban los trajes búlgaros tenían un propósito especial. Además de ser un bonito adorno que revelaba información sobre el estado social y la pertenencia a una región determinada, en él había bordados mensajes ocultos. No es casual que desempeñaran un papel de elemento envolvente alrededor de las partes expuestas del cuerpo. Los colores son un elemento importante en su simbolismo. Sobre una base blanca, expresión de pureza, impenetrabilidad y luz divina, destaca el rojo, que es el comienzo y la continuación de la vida, la sangre materna que protege del mal de ojo. El verde representa el árbol de la vida y el renacimiento de la naturaleza, y el oro, como el sol y el fuego, trae la prosperidad y la luz.

Precisamente a través de los bordados nuestras abuelas y bisabuelas protegían a sus seres queridos de las malas influencias y bendecían a sus descendientes para que tuvieran salud, fertilidad y prosperidad. Por este motivo, conocían en detalle la importancia de las imágenes estilizadas combinadas con determinadas combinaciones de formas geométricas. Llenas de amor por el hogar y el mundo a su alrededor, las figuras bordadas únicas se transmitían de generación en generación. Con el cambio de estilo en la ropa, la fuerza de los mensajes bordados se fue perdiendo gradualmente en el tiempo. Solo han llegado a la actualidad las formas de adornos con figuras geométricas estilizadas que son características de los trajes de diferentes partes de Bulgaria. Ya sea por el creciente interés de los jóvenes en las tradiciones, o gracias a los investigadores de los bordados, éstos vuelven a tener su lugar en nuestro estilo de vida y arte contemporáneo. Gracias a eventos folclóricos y temáticos, los bordados revelan sus antiguos mensajes al público general.

Y si queréis sentir su magia y conocer su historia, la ciudad de Beloslav abre sus puertas para el 2º Festival de Bordado:

Este festival existe desde el año pasado, pero su origen tiene una historia mucho más antigua, explica Slavian Stoyanov, uno de los organizadores del festival. Está relacionado con nuestro trabajo. Yo me dedico a la etnografía y la arqueología, de ahí mi interés por el bordado. Muchos de los motivos encontrados en los bordados se encuentran en objetos hallados en excavaciones arqueológicas. Han sobrevivido de forma increíble hasta la actualidad. Mi mujer, que decidió restaurar una vieja camisa bordada de su abuelo, tuvo la idea de crear el festival, y con el tiempo llegó el momento de hacerlo realidad.

Los participantes del foro son personas que se dedican a la preservación del bordado auténtico y también a la reconstrucción de los trajes tradicionales. También hay artistas que confeccionan artículos modernos con auténticos motivos de bordados. Lo importante es que todos respeten los requisitos básicos de participación, porque queremos preservar la tradición auténtica. Queremos que las personas que recrean los motivos sepan de dónde son y que transmitan la información al destinatario, subraya Slavyan Stoyanov.



Entre los conferenciantes del festival se encuentran la periodista Boyka Asiova, la crítica de arte Julia Boeva y la investigadora Iren Yancheva, quienes presentarán sus investigaciones relacionadas con la historia del bordado. El programa del festival incluye también exposiciones, entre ellas la colección de Radoslav Radkov e Ilonka Stankova, que se dedican a preservar trajes tradicionales auténticos y coleccionan modelos conservados de diferentes partes de Bulgaria. La Fundación “Búlgaro” presentará una exposición de cuadros de temática folclóricas de artistas búlgaros y los fondos obtenidos de las obras vendidas se destinarán a apoyar el museo etnográfico y las escuelas. También habrá una exposición conjunta del Museo de Historia de Provadia, titulada "La Diosa Madre: Una historia básica en la obra bordada.

Diversos grupos de baile y artistas de música folclórica se ocuparán del buen humor de participantes y visitantes del festival

Versión en español por Marta Ros
Fotos: Archivo