En medio del bosque secular y de los verdes prados de la mística montaña búlgara Ródope se celebra un festival extraurbano nada tradicional que reúne bajo el cielo abierto a músicos, actores, acróbatas, poetas y pintores de todo el país. Se le conoce como el Beglika Fest, por el nombre de la pintoresca represa Goliam Beglik, un sitio muy atractivo para los aficionados al ocio en medio de la naturaleza.

El escenario Impro–Jam permite a cualquiera pasar por diferentes talleres workshop. El violinista Konstantín Kuchev presentará su proyecto Crea para mí. Este músico hace improvisaciones en tiempo real, se inspira en el contacto con el público y de ahí nacen nuevas canciones, poemas y danzas al son del violín. En nuestro programa tradicional hay un sector denominado Salud y autoconocimiento en el que habrá gran variedad de actividades: yoga, human design, prácticas de Reiki y terapia musical, a través de los cuales presentamos una cultura universal que refleja el amor que nos une y el amor a la Tierra y todo lo que nos rodea.



Participarán varios grupos búlgaros que apuestan en las tradiciones nacionales ya que en la actualidad necesitamos volver sobre nuestras raíces y tomar fuerza de ellas. En lo personal me dedico desde hace años a la acrobacia circense y ahora soy organizadora del escenario circense. El circo siempre ha estado presente en el núcleo de Beglika Fest. Cada día en el marco del festival habrá ejercicios de malabarismo y acrobacia aérea. Nos acompañarán también los titiriteros de “Male-Male” e “Igrachka–Plachko” que harán teatro de títeres para los más pequeños. Friki–Fi es un malabarista con un espectáculo de fuego propio, y un grupo de acróbatas de Sofía bailará en zancos vistiendo feéricos trajes en medio de los prados.

Vamos en medio de la naturaleza para disfrutar de ella. Dejémosla tal y como fue antes de que nosotros la visitáramos para que podamos disfrutar de ella por más tiempo, dice Benita Primo y recuerda los principios de Beglika Fest que descartan el uso de cubiertos de plástico e incitan a reducir el consumo de carne en la medida de lo posible. Respecto de la protección ambiental y la educación estética en medio de la naturaleza agrega:

Hace años, cuando se celebró el primer festival, lo dedicamos a la salvación de dos cimas de la zona ante las nefastas pretensiones de la Empresa. Este objetivo fue logrado. Otro de nuestros objetivos fue la preservación de la población del urogallo, un ave muy difundida en Europa pero en riesgo de extinción en Bulgaria. En este sitio acampan muchas personas. La represa es de aguas tranquilas y limpias. Todo quien la vea desea volver una y otra vez a ella. Hay, sin embargo, turistas que no saben cómo comportarse en medio de la naturaleza.



Al marcharse dejan montones de basura que empieza a pudrirse y contamina el agua de la represa. Producto de esta contaminación vamos perdiendo animales y plantas. Incito a todo quien ama la represa Goliam Beglik a que traiga consigo una bolsa para los desechos y que, al marcharse, se la lleve para tirarla en un verdadero vertedero. Muchos búlgaros se avergüenzan de cargar su basura en su coche pero esta práctica es muy importante para que podamos preservar la naturaleza.

Versión en español por Raina Petkova
Fotos: beglika.org