Algunos han dado en llamar a los minerales “las flores de la montaña”, ya que, al igual que las hermosas plantas, fascinan por su belleza y colores. Son inodoros pero la energía que irradian es de igual avasalladora y cautivante. Cuando uno se fija en sus formas cristalinas, parece que el tiempo deja de existir hundiéndose en la historia milenaria en el transcurso de la cual se ha ido formando cada piedra rara.

Según la geóloga Stela Todorova, de la meridional ciudad búlgara de Kardzhalí el Monte Ródope es la montaña más rica en variedades de minerales en los Balcanes, al empezar por los diferentes tipos de formas de cuarzo para llegar a las ágatas. Hay granates, aguamarinas, turmalina, morión.

La geóloga opina que la naturaleza siempre está dispuesta a revelarse ante quienes van en pos de la hermosura: Los geoides simbolizan el misterio de la naturaleza. Si miramos por fuera no descubrimos nada en especial pero es por dentro donde aparece toda la hermosura. El término geoide proviene de Gea, la diosa de la Tierra o de geo esfera, globo .Se trata de una burbuja, resultado del enfriamiento de la lava, que posteriormente se va colmando de sustancias diferentes. Es así como se forman los cuarzos. Hay también geoides calcitas. Difícilmente podrían ser notados en su forma cruda, tal y como están en la naturaleza. En fin, se trata de una piedra, una roca. Las hermosas formaciones de cristales de forman en huecos. Mientras más ideal sea un entorno más correcta será la forma del cristal que resultará así más vistoso. Un ser humano al criarse en un entorno ideal se vuelve una persona ideal. Otro tanto ocurre con los cristales. Cuando la lava se enfría más lentamente, teniendo una temperatura elevada y si hay espacio se forman los cristales más hermosos. Si es espacio es angosto entonces el cristal se tuerce. Si las soluciones que cruzan por las cavidades formadas por la lava son más enfriadas y se solidifican con mayor rapidez aparece la posibilidad de que se forme un cristal en una masa densa y homogénea. En la naturaleza se puede uno topar con cosas muy bellas que obedecen a determinada lógica, no hay nada que sea fruto de la casualidad. Hay formas que frisan en el misticismo, en la fantasía. La imaginación humana es capaz de ver cualquier cosa. La naturaleza nos ofrece a cada uno de nosotros la oportunidad de ver lo que le emociona e inquieta. La armonía de la naturaleza propicia condiciones para el equilibrio del propio ser humano.

También irradian armonía los paneles elaborados por Petar Zaprianov, de Kardzhali, amigo y correligionario de Stela Todorova. Ha sido precisamente Stela quien le ha movido a enseñar al público sus cuadros de piedras. Mi afán principal ha sido hacer una colección de minerales, recogidos en las afueras de Kardzhali, dice Petar. Se trata de una treintena de minerales de diverso tipo que yo combino en un cuadro. Reunidos así en un área los cristales me gustan todavía más. Al ordenar los cristales siempre parto de algún punto en mi fuero interno y pretendo colocar la piedrecita en un lugar determinado. Realmente parece curioso cómo en un espacio reducido va uno desplazado una ágata de un lugar para otro hasta ponerla en el puesto fijo. Luego, en torno suyo vas edificando el mundo, su mundo de los minerales. Algunas piedras no se soportan unas a las otras, se percibe cierta tensión entre ellas, otras se reclaman y se atraen mutuamente como colores y como composición mineralógica. No me propongo buscar una explicación sobre todo esto. Por cierto, si me afano a buscarla, la encontraré desde el punto de vista meramente geológico, pero no siento necesidad de buscar tal explicación.

Cada habitante y visitante de la capital de Bulgaria podrá sentir la magia de los cristales al trasladarse al museo “La Tierra y los seres humanos” en el cual se exhibe la increíble colección “cristales gigantes”, un donativo hecho en 1985 por nuestro compatriota patriota Ilya Delev. Toda persona puede conocer cosas increíbles sobre el maravilloso mundo de los minerales en las muestras tradicionales organizadas en el citado museo cada año, como también durante las diferentes manifestaciones conmemorativas del Día Mundial del planeta Tierra, 22 de abril, El Día Mundial del Agua, 22 de marzo, el Día Mundial del Medio Ambiente, 5 de junio y las Jornadas Europeas de los Minerales.

Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: Darina Grigorova