Frutas y legumbres insípidas y de tamaño igual, colmadas de productos químicos antes que de vitaminas, productos que contienen organismos genéticamente modificados, característicos para tierras foráneas ya no son raros tampoco para el mercado búlgaro. Las abuelas evocan los tiempos de antaño cuando todo era aromático y sabroso mientras nosotros esbozamos leves sonrisas vacilantes. No obstante ello, en comparación con algunos de los países restantes de Europa en cuyos supermercados uno puede comprarse un kilo de tomate o un kilo de plástico de sabor idéntico, en Bulgaria se pueden encontrar todavía productos de calidad. Son los que disfrutan de una gran demanda, al igual que las frutas y hortalizas biológicas y esto es una noticia satisfactoria.

Ahora vamos a entrevistarnos con Cristian y su esposa Valentina para conocer su nueva pasión que es la agricultura biológica. Ambos han tenido una carrera exitosa de modelos y siguen inseparables desde que se conocieron en Hong Kong durante un viaje de trabajo. Optaron por ir en pos de sus sueños viajando a Nueva York, donde consiguieron desarrollar salas deportivas de boxeo. El destino los llevó también a Francia, Alemania y España, pero ahora los dos se encuentran en un lugar mucho más modesto en cuanto a acontecimientos, pero mucho más rico en cuanto a la naturaleza. Se trata de la aldea de Akandzhievo, en la montaña de Sredna Gora. La joven pareja adquirió tierras en ese pueblo y las comenzó a cultivar. Nació así la granja biológica “Pura vida Organic Farm”. Con la asistencia de la familia de Valentina, de gente del pueblo y con mucho cariño ahora se cultivan en la granja tomates, pepinos, espinaca, cebolla, cerezas, manzanas, peras biológicos, como también algunas variedades más insólitas de legumbres que los dos han traído de los EE.UU.

¿Qué quiere decir exactamente biológico y cómo se protegen los cultivos sin fumigar contra las plagas?

Lo de bio significa que la tierra no sea tratada con ningún tipo de productos químicos y que las plantas no sean fumigadas tampoco. Es importante que en las parcelas colindantes a las nuestras se haga otro tanto para así evitar la propagación de productos químicos. La agricultura biológica es la agricultura más pura y en mayor conformidad con la naturaleza. No sabíamos nada de este tipo de agricultura y tuvimos que leer montones de libros para informarnos. La materia es inmensa y uno aprende sin cesar avanzando en base al principio de prueba-error. Protegemos los cultivos contra insectos al fumigar con una solución de ortiga cocida, agua y ceniza de madera. Parece increíble pero todo marcha a las mil maravillas. Nos valemos, asimismo, de la alelopatía cultivando plantas que se ayudan mutuamente contra las plagas. Mi mayor problema eran las plagas y los insectos, pero luego resultó que había otro mayor: las veleidades del tiempo atmosférico y las temperaturas en los invernaderos. Algunas cosas las vamos aprendiendo de la forma difícil, dice Cristian.

La granja ha insuflado nueva vida a la aldea al ofrecer empleo a una parte de sus vecinos. También se vuelven frecuentes las visitas al pueblo de gente de otras regiones del país. De momento el joven matrimonio invierte únicamente recursos propios en el mantenimiento de la granja, pero planea postular a recursos de programas estatales y europeos.

Cristian explica ahora cómo transcurre una jornada en la granja y formula algunos consejos a las personas que decidan cultivar productos biológicos.

La jornada se inicia muy de madrugada, a las 4 horas 30 minutos, Estamos en verano y no recomiendo que uno se ajetree en los invernaderos pasadas las 9 de la mañana. Les estoy agradecido a las mujeres que trabajan. Voy al trabajo a eso de las nueve y me ocupo del duro trabajo masculino. La jornada se prolonga hasta las 10 o las 11 de la noche. A la gente que desee dedicarse a la agricultura biológica le diré que tiene que confiar en sí misma, no prestar atención a los comentarios negativos y no renunciar fácilmente. Los productos biológicos son cada vez más difíciles de conseguir, y Bulgaria tiene un potencial enorme para producirlos. La tierra es muy fértil y esto hay que aprovecharlo. Además la agricultura biológica atrae a muchos turistas.

Este granjero cree que todo puede tener buen desarrollo al existir cariño y entendimiento entre los seres humanos. Tras unos pocos meses de existencia, a granja biológica ya disfruta de bastantes admiradores quienes publican a diario en las redes sociales sus comentarios de gratitud y cuelgan fotos de manjares bio. l deseo de Cristian es transformar la granja en el futuro en un centro de recuperación y rehabilitación en el que deportistas y personas con problemas de salud podrán descansar en el regazo de la naturaleza, disfrutar del aire cristalino y tener una dieta sana.

Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: Archivo personal