La historia que alteró repentinamente la vida de Mijail Jristov ocurrió hace una decena de años cuando el joven sufrió la descarga de un arco voltaico. El joven, entonces de 15 años de edad, sobrevivió de milagro, pero tuvo que ser sometido a una intervención quirúrgica, en la cual le fueron amputadas ambas manos: una hasta el codo, y la otra hasta el hombro. A pesar del durísimo trance, Mijail hizo acopio de fuerzas para seguir adelante. Buscó un nuevo camino en su vida y lo encontró en el deporte profesional: en el salto largo y la carrera de velocidad. Tuvo una extraordinaria importancia para su elección la reunión y conversación que sostuvo con Stela Eneva, campeona paraolímpica en el lanzamiento de disco.

Le preguntamos a Mijail, ¿qué es lo que le ayuda en los mementos duros para que no se encierre en su caparazón?

“En la mayoría de las personas que sufren tan duros trances ocurre precisamente esto. Se aíslan del mundo, se encierran en sus problemas. Al comienzo encontré el pleno respaldo de mis padres y de los amigos que estaban continuamente a mi lado. Sin embargo, el factor principal que me hizo abandonar mi aislamiento fui yo mismo. Me dije que tenía que seguir luchando e ir demostrando ante el mundo de que no había límites para las capacidades humanas”.

Mijail concluyó sus estudios en el liceo ostentando el segundo puesto por las mejores notas en su promoción. En el salto largo llegó a ser recordista europeo y mundial, fue en dos ocasiones campeón mundial. Fue propuesto para el título de “Búlgaro digno” en 2014. El motivo formal para nuestra entrevista con Mijail Jristov ha sido el Campeonato Mundial de atletismo para personas con discapacidades, en Qatar, recientemente clausurado, en el cual Mijail ocupó, lamentablemente, el quinto puesto en el salto largo, superando 6 metros con 57 centímetros. En el deporte esto puede suceder, ya que, pese a la buena preparación, circunstancias del momento trastocan, en ocasiones, el orden en la lista de los vencedores. El deportista verdadero es el que no sólo sabe triunfar, sino también perder con dignidad. Ahora habiéndose apaciguado las emociones, Mijail comenta su participación en ese Campeonato Mundial.

“La competición fue emocional e imprevisible. Una parte de mis rivales eran personas nuevas para mí y bastante más sanos. No estoy contento con mi resultado. Estuve entrenando por espacio de más de un año y aspiraba a lograr un resultado mejor. Sin embargo, el tiempo que hacía en Qatar y la importante humedad en ese país han incidido negativamente en mi salto”.

Es un matiz particular de la vida de Mijail su predilección por los desafíos. Así, ha participado en pruebas al lado de atletas completamente sanos. Hay más y es que incluso ha desafiado a las máquinas.

“No simplemente rivalizo con atletas sanos, sino que también he comenzado a triunfar frente a tales rivales y a alzarme con medallas en tales pruebas. Otro de mis sueños era poderme enfrentar a un coche o una moto y comprobar si un ser humano es capaz de triunfar frente a la máquina en una carrera desigual. Por esta razón participé en el experimento que denominamos “Mijail contra las máquinas”. La moto y el auto eran conducidos por los mejores compatriotas nuestros en estos deportes del motor: Anguel Karaniorov y Krum Donchev. Me estuve entrenando largo tiempo y triunfé frente a las máquinas en una distancia de 30 metros. Los conocedores de los deportes del motor bien saben que a una distancia mayor ya resulta imposible que uno triunfe frente a tal tipo de quipo deportivo. Sin embargo, a la corta distancia, el hombre ha sido campeón”

El mensaje que Mijail Jristov envía a numerosos admiradores.

“Quiero que confíen en sí. Vengo notando en Bulgaria una tendencia mala: la gente desconfía de su propio potencial, no tiene fe en lo que es capaz de hacer. No se da cuenta de que uno es forjador de su propio destino. Yo, por ejemplo, quería aprender a manejar un coche y hoy ya manejo uno. Quería dedicarme al deporte profesional, y lo estoy haciendo. Son cosas que se vuelven posibles gracias a nuestros esfuerzos, nuestro sueños y afanes”.

Mijail no oculta tampoco su interés por la política. Hace un año se volvió muy popular al lanzar un mensaje en video en el que exhortaba a los diputados a no ofrecer promesas vanas, sino a obrar efectivamente por el desarrollo del país.

¿Cuál es, a su juicio, el camino por el que hemos de transitar para transformar a Bulgaria en un lugar mejor para vivir?

“El camino es uno solo: la gente debe andar mancomunada, tener una conciencia cívica despierta, insistir en ser parte de la gestión. Es que los políticos se olvidan de que somos nosotros, el pueblo, sus empleadores. La gente debe emitir sus posiciones con respecto a las decisiones que toman los políticos y pedirles a éstos responsabilidad por sus actos”, dice Mijail Jristov, bicampeón mundial en el salto largo.

Versión en español por Mijail Mijailov
Fotos: Archivo personal