Veliki Preslav (Gran Preslav) fue la segunda capital del Primer Reino Búlgaro, después de Pliska. En el año 893 a.C., cuando fue declarada capital de Bulgaria, se convirtió en la sede de la primera escuela literaria búlgara. Se desarrolló como un importante centro literario y cultural en Bulgaria y en el mundo eslavo en el cual han vivido eminentes escritores y científicos medievales.

Durante la Edad Media búlgara, Veliki Preslav fue una de las ciudades más bellas y monumentales del sureste de Europa. En ella se conservan muchos monumentos de la cultura de Pliska y Preslav. La ciudad estaba rodeada por una gruesa muralla de piedra blanca, y bien protegidos, en el interior de la ciudad, estaban el palacio y la residencia real.

Unos de los hallazgos más valiosos de este periodo son el icono de cerámica de San Teodoro Stratilat, el tesoro de oro de Preslav, el iconostasio de cerámica del monasterio del palacio real, una figura de ajedrez (un peón), etc. Todos ellos se pueden ver en el Museo adscrito a la Reserva Nacional Histórico-Arqueológica de Veliki Preslav, ubicado sobre las ruinas de la antigua capital búlgara. Las excavaciones arqueológicas del último siglo muestran que Preslav fue concebida y construida por los búlgaros como un centro de magnificencia que en su tiempo fue una digna rival de la capital bizantina Constantinopla.

Prueba de ello son los hallazgos que han pasado por las manos del profesor arqueólogo Stoyko Bonev, que explora los restos de la antigua ciudad desde hace casi 40 años:“Este es uno de los sitios más difíciles de estudiar de la Edad Media búlgara. Los cimientos se hunden profundamente en la tierra y las piedras que se usaron para hacer el edificio son de 300-400 kg. Tanto los cimientos como los muros miden dos metros de ancho, y las paredes están construidas con bloques de piedra y mortero. Este edificio, que al parecer era majestuoso y magnífico, de impresionante tamaño, cosa poco habitual en nuestra tierra, es una obra maestra de la arquitectura búlgara. Por otra parte, estaba ricamente decorado; aquí hemos encontrado esculturas de piedra, cerámica pintada, vidrieras en las ventanas. Es evidente que tal edificio no podía ser de una persona normal y corriente, sino que se hizo para personas con un alto estatus social. Lo que me asombra son las losas de piedra que demuestran un gran dominio en el arte de la talla de piedra. Son cosas que no encajan en otros edificios. Todo el conjunto era el hogar del señor de la región”.

La zona en que se encuentra la reserva histórica es enorme, de más de 500 hectáreas; no se puede abarcar en un solo día. Los turistas suelen quedar impresionados por las puertas de hierro de la fortaleza y las paredes blancas de la Iglesia “Dorada” que se ha conservado y recuerda la vida espiritual en la primera capital de Bulgaria, tras la adquisición de la fe cristiana. La otra iglesia, la palaciega, ha sido restaurada parcialmente”.

“Estamos trabajando en un proyecto a largo plazo para la restauración y conservación de dos de los sitios en la Reserva Histórico-Arqueológica: la iglesia palaciega y la basílica de los soberanos – dice Plamen Dimitrov, director del museo adscrito a la Reserva Histórico-Arqueológica de “Veliki Preslav” –. Tenemos previsto restaurar y reconstruir los muros con el fin de mostrar el aspecto original de estos dos edificios. También trabajamos en la creación de un sistema de información multimedia que permitirá a los turistas obtener información en tiempo real acerca de todos los servicios disponibles de la ciudad. Otro lugar de interés en el centro de Veliki Preslav es la Iglesia de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, construida en el estilo típico para el Renacimiento Nacional Búlgaro (siglos XVIII a XIX). Los dos santos son patronos de Veliki Preslav, y el Padre Nicolás, un sacerdote del templo, siempre está dispuesto a contar a los turistas leyendas e historias sobre esa época en que se construyó la iglesia".

Versión en español por Hristina Taseva
Fotos: wikipedia.org