Los diputados búlgaros han creado una comisión ad hoc sobre la crisis energética y los precios exorbitantes de la luz. También han aprobado la propuesta de la coalición opositora GERB−CDC (Ciudadanos por el Desarrollo Europeo de Bulgaria−Unión de Fuerzas Democráticas) de imponer una moratoria al precio de la luz, que se congelará al nivel del 1 de enero del año en curso. El grupo parlamentario del Movimiento por Derechos y Libertades (DPC, representante de la etnia turca) no ha participado en la votación.
“Es un viejo cliché parlamentario crear una comisión temporal cuando se quiere aplazar una decisión”, ha comentado Hasán Ademov del DPC. En su opinión, el objetivo de la comisión es transferir la responsabilidad del Ejecutivo al Parlamento.
Al rato, la comisión ad hoc ha decidido modificar el plazo de vigencia de la decisión y ésta entrará en vigor el 16 de diciembre con validez hasta el 31 de marzo de 2022. La decisión será presentada en la Administración del Parlamento para ser estudiada y sometida a votación por los diputados en la sala de plenos.
“Semejante disparate sobre una congelación de las tarifas de la luz, la calefacción y el agua solo puede ser concebida en la mente de los exgobernantes del GERB, y no por preocupación porque los búlgaros no pasen frío durante el invierno. Al contrario, lo han hecho en interés de un grupo de inversionistas que actualmente están ganando enormes cantidades de dinero. Con esta moratoria, seguirán acumulando ganancias también el año que viene”, ha opinado en Radio Nacional de Bulgaria Rumen Ovcharov del Partido Socialista Búlgaro, exministro de Energía.
