A pesar del clima inusualmente fresco para comienzos de junio, las playas del litoral meridional búlgaro del mar Negro ya se encuentran preparadas para acoger a veraneantes. Según los contratos de gestión de las playas, desde el pasado 1 de junio las franjas playeras han de contar con socorristas y personal de asistencia sanitaria. Se está a la espera de la llegada de turistas.

Ante la emisora regional de Radio Nacional de Bulgaria (BNR) en Burgás, una de las dos ciudades marítimas búlgaras más importantes, Vladimir Kisyov, de la Asociación de Arrendatarios de Playas, ha comentado la decisión tomada por el Gobierno de que cada arrendatario decida por sí mismo si reducir o no el precio de los servicios ofrecidos en la playa que gestiona:

”La mayoría de nuestros afiliados han hecho los respectivos descuentos con el fin de poder atraer a turistas nacionales, puesto que constatamos que el problema causado por el coronavirus en Europa y el resto del mundo todavía sigue golpeando la libertad de viajar. La casi totalidad de los vuelos hasta el próximo 21 de junio desde Europa Occidental con destino a los aeropuertos búlgaros de Burgás y Varna han sido cancelados. No obstante, las playas de los centros de veraneo de Slanchev Briag, Nesébar, Sozópol y más al sur de este último están dotadas con socorristas y personal médico. Ahora lo único que estamos ansiando es que haga buen tiempo”.

Vladimir Kisyov espera una labor intensa de los órganos de control en las zonas costeras y una reducción en el número de las prácticas no reglamentadas en los precios de las sombrillas y las tumbonas, en comparación con el verano anterior.

En las playas de mayor extensión como la de Slanchev Briag (Costa del Sol), la arena ha sido limpiada y desparasitada y se han ordenado todas las sombrillas y tumbonas. Durante todo el verano se estará vigilando si son respetados los requisitos de seguridad, incluidos los requisitos con respecto a la epidemia de Covid−19. Así, las sombrillas deben encontrarse a una distancia de 4.5 metros una de otras y se ha asegurado un número suficiente de empleados que hagan la desinfección de los utensilios playeros tras su uso por un veraneante. Un año más, todas y cada una de las franjas playeras del balneario ostentan el distintivo Bandera Azul, otorgado anualmente por la Fundación Europea de Educación Ambiental. A pesar de todo ello, este centro de veraneo sigue todavía desierto, según indica una encuesta realizada por la emisora regional de Radio Nacional de Bulgaria en Burgás:

“Este año Slanchev Briag aparece mucho más desierto que el verano pasado. Los turistas escasean. En el edificio donde estamos alojados se oye habla extranjera, mayormente rusa, pero muy probablemente se trata de unos rusos que han comprado bienes inmuebles aquí”, dice una de las personas encuestadas.

“No sé por qué se afirma que la temporada ha arrancado, si no hay bastantes turistas”, señala otra.

“No todos los establecimientos están funcionando, las obras de reparación aún están en marcha”, interviene una tercera persona.

Este verano los utensilios playeros de la Playa Norte de Burgás serán de uso gratuito. De este modo quienes la administran se hace eco del llamado del Ministerio de Turismo de hacer un gesto de cortesía a los turistas. Simeón Tsvetkov, representante del arrendatario de esta playa, se muestra escéptico de que las facilidades prometidas por el Estado sean suficientes para cubrir sus gastos:

”La tasa que hay que pagar por el arrendamiento representa solo una parte de los gastos durante la temporada turística. Los demás son los gastos en la limpieza, las medidas de seguridad en la playa, la dotación de personal sanitario. Todo ello acarrea un aumento de los gastos. Las medidas anti−Covid−19 forman un capítulo aparte, y cada chiringuito de la playa debe respetarlas. El número de las sombrillas se ha vuelto más reducido por haberse extendido el área que deben ocupar, y esto significa unos ingresos menores”.

Pese al arduo comienzo de la temporada estival, las expectativas de los arrendatarios de playas en la costa del mar Negro son que sea mejor que el año 2020.

Adaptado por Krasimir Martinov en base a entrevistas a la emisora regional de Radio Nacional de Bulgaria en Burgás

Versión en español por Mijail Mijailov