Un veterinario y su joven hija dan nueva vida a las flores secas

Publicado el 12/01/19 10:25

Unas gotas perfumadas y un cuenco de flores secas. Solo dos componentes han sido necesarias para el Dr. Zdravko Dimitrov para crear un negocio que hace 18 años le brinda satisfacción y alegría al estar en contacto con las hermosas creaciones del mundo que nos rodea.

Cuando se graduó en medicina veterinaria, el joven doctor Veliko Tarnovo al principio no pudo encontrar trabajo y comenzó a hacer negocios. Un día, aburrido detrás del mostrador, hecho unas gotas de una fragancia en un ramo de flores seco puesto en un bol de cristal, y una clienta atraída por el aroma lo compró de inmediato. Así comenzó el negocio con flores aromáticas secas, que sólo la familia del Dr. Zdravko Dimitrov sigue desarrollando hasta hoy. El producto aromático definitivo tiene un nombre francés:” pot pourri”, una mezcla de todo tipo de flores y plantas secas, explica él.

Las composiciones de flores secas de campo, teñidas con pinturas inofensivas y aromatizadas con esencias suizas, atraen con su aroma y belleza a los clientes de gusto refinado. Ramos en botellas, cestas, regalos en forma de bicicletas estos son sólo algunos de los artículos que la familia del médico crea.

Las flores más hermosas son las que se recogen en primavera y verano, pero también son menos perecederas. Y para que no se quiebren fácilmente, comenzamos a poner hojas más duras: de eucalipto y de algunos arbustos. Por otro lado, las plantas leñosas conservan mejor el aroma, por lo que agregamos una variedad de plantas de ese tipo, de esta manera el Dr. Zdravko Dimitrov revela la exitosa receta del ramo con fragancia. En él se entrelazan milenrama blanca y amarilla, trébol, limón, helecho, bellotas, ramas de olivo, musgo, etc. Pero, aparte de la alegría para los ojos, las flores secas también pueden tener un efecto terapéutico mediante las fragancias: naranja para la felicidad, canela para relajarse, ámbar para calmarse.

En las praderas o en casa: la asistente más fiel del doctor es su hija de 13 años, Stela, que además de ser bailarina con su grupo de ballet que se llama “Balletino” ha ganado muchos premios. Ella sueña con ser como su papá, doctora, pero humanitaria, y seguir con el negocio de las flores.

Stela es de aquellas personas que aman hacer de todo, pegar, arreglar algo constantemente, dice el padre de la niña. Pero no sólo ella participa en el negocio, sino también mi esposa y mi hijo menor. En un momento noté que a mi hija le agradaba lo de las flores, así que decidí que debía haber más responsabilidad en nuestro negocio familiar. Así que creé su propia marca que se la regalé cuando cumplió 12 años, y espero que algún día la desarrolle. De hecho, ella tomó las cosas en serio y ahora participa en todas las fases: cuando hay que recolectar, secar, arreglar y pintar las flores. Lo mejor que hace es vender, se pone en primera línea y todo va muy bien.

El Dr. Zdravko Dimitrov dice que él es una persona feliz, porque tiene dos grandes amores además de la familia: los animales y las flores.

Siempre quise ser veterinario, era el sueño de mi infancia, agrega. Y hoy, con suerte y persistencia, tengo mi propia clínica veterinaria en Veliko Tarnovo, lo que me llena de satisfacción. El negocio de las flores comenzó por accidente. Hubo momentos en que la situación económica había empeorado y la gente no estaba en condiciones de comprar flores. Con el tiempo hemos resistido, ahora se nota un renacimiento y el mercado se está desarrollando. Darle vida a una flor, incluso después de su muerte, para que traiga alegría con su belleza y su aroma, es algo que realmente da placer.

Versión en español por Ludmila Sávova
Fotos: Archivo personal

Compartir

Un veterinario y su joven hija dan nueva vida a las flores secas

Compartir

Más de la sección

La arqueología: una causa para las personas que descubren y defienden el patrimonio histórico de Bulgaria

El climatólogo Gueorgui Rachev: “Ante la calidad del aire todos somos iguales”

Boicot nacional a las tiendas en Bulgaria: ¿qué esperan los ciudadanos?

El protodiácono Liubomir Bratoev: “Las primeras misas en búlgaro en Berlín tuvieron lugar en el salón de la Embajada búlgara”