Las agencias internacionales de notación financiera Standard  & Poors  y Fitch han confirmado sus  calificaciones sobre Bulgaria como país beneficiario de créditos, informan desde el Ministerio de Hacienda de Bulgaria. Estas calificaciones  siguen siendo bastante  modestas  y  escasamente atractivas para los inversores  internacionales. En efecto, la valoración  de la Fitch,  BBB, respectivamente en  divisa extranjera y moneda nacional, con perspectiva estable, no ofrece nada  atractivo para los  importantes  fondos  de inversiones y de pensiones  internacionales que suelen ser los compradores más importantes  también de  los  Bonos de Estado. Lo mismo es válido también para  el rating otorgado por la Standard  & Poors  BB+ B, con perspectiva estable.

Lo anterior significa, en la práctica, que cuando el gobierno búlgaro decide contraer  un préstamo estatal soberano en los mercados monetarios internacionales, los  eventuales  compradores de  deuda búlgara primero  verifican  lo que a este respecto opinan las  agencias crediticias y lo que éstas  recomiendan. En función de las valoraciones de  estas agencias deciden si invertir o no en bonos del tesoro búlgaros y qué precio pedir por el dinero  prestado a Bulgaria. Mientras  más baja sea la calificación de las agencias de notación financiera  menor será el número de los inversores propensos a adquirir deuda búlgara y más altos resultarán los tipos de interés que pidan por el  préstamo concedido sin aval.

Desde este punto de vista  las valoraciones que Bulgaria  obtiene  son bastante  modestas y cautelosas. Este país no está siendo considerado como país de alto riesgo pero tampoco es recomendado para hacer inversiones seguras como  ocurre  con los países de una  o varias A. Sin embargo, el dinero  disponible en el mundo es tanto que en la práctica no se  omiten tampoco , a simple vista, incluso las  posibilidades menores de que tal dinero genere  cierta renta. O sea no faltan inversores  incluso para los títulos de valores de la clase B y esto  fue  nuevamente demostrado por Bulgaria  que  ha contraído en los mercados extranjeros  créditos  bastante ventajosos por valor  de más de 2 mil millones de euros y con tipos de interés  muy aceptables, de un 2 %.

Las calificaciones de las agencias de notación sobre  el grado  de atracción, la renta generada  y la seguridad de las inversiones en  títulos de valores  estatales siempre vienen acompañadas y basadas en  análisis  del estado económico del país  calificado. A la hora de fijar sus ratings más recientes las dos agencias internacionales ,citadas al comienzo, resaltan bastantes ventajas del sector económico búlgaro pero  no omiten tampoco destacar  sus  lados  débiles. Sin entrar en  detalles innecesarios, cabe mencionar únicamente  sus  pronósticos  cautelosos y  moderados sobre el crecimiento económico de Bulgaria en 2016.Ambas agencias estiman que  el PIB en 2016 aumentará  un 2 % , aproximadamente, lo cual no es un logro cimero y, en cualquier caso,  resulta bastante  insatisfactorio desde el punto de vista del retraso general del país. Hay que recuperar este retraso para que sea logrado  cierto  decente nivel europeo.

Tienen ánimos  bastante más optimistas  los  directivos del Banco Mundial cuyo representante en Bulgaria Tony Thomson ha expresado  ver  bastantes reservas en  la economía búlgara cuyo aprovechamiento podría redundar en un crecimiento de incluso un 4%.

Cuantos economistas tantos pronósticos  y  valoraciones. Es una verdad notoria que  en este caso  sólo ha encontrado una nueva confirmación. Todo parece indicar que a esta etapa priman , con todo, la cautela y el optimismo moderado, después de que las propias autoridades búlgaras  han asumido que el crecimiento económico se situará más cerca  al que auguran las agencias de notación financiera, y no  al soñado 4% vaticinado por el Banco Mundial. No obstante, el primer ministro búlgaro Boyko Borisov, famoso por su optimismo, hasta ha llegado a augurar un crecimiento del 4,5% y esto también  hay que tenerlo en cuenta.